Eugenia Eiriz
[...] Y termino, aunque conocí a Toni Miró de la mano de Gades, ha sido su ausencia más bien la que nos ha unido. Encontré en él al amigo que me recuerda a Antonio y, aunque no siempre estemos de acuerdo, nunca olvido que su consejo pueda ser el que Toni hubiera dado a Gades, que él le habría escuchado. También pienso en lo mucho que se han reído juntos... y eso me hace muy feliz. [...]Texto completo