Masha Yufa
[...] En las obras de Antoni, el espejo ha sido sustituido por la matriz, donde la reflexión ha hallado su último refugio. Su arte transforma la vida en otra dimensión. Es la existencia de los signos con su simbolismo y con su metamorfosis, dirigidos al intelecto del espectador. Se parece a Odiseo que, buscando su suerte, vagaba por el reino de Hades, haciendo hablar a las almas de los muertos. Allí se mezclaban el presente y el pasado y se veía el futuro. Pero nada tenía carne terrena. [...]Texto completo