Francesc Bernàcer
[...] los carteles de Antoni Miró nos hablan a todos y nos dicen siempre. Tienen la simplicidad de lo verdaderamente poético, la autenticidad de las verdades siempre por delante. Como la verdadera poesía –y los carteles de Miró tienen también mucha–, son la palabra plástica en el tiempo y permanecen vivos todavía. [...]Texto completo